viernes, 13 de enero de 2012

Np_03/01/2013___________________

Una gallega que registró el grito de Tarzán reclama 100.000 euros a la SGAE


La viguesa que se proclamó dueña del sol también registró a su nombre el grito de Tarzán en el 2008 y ahora reclama por vía judicial que la Sociedad General de Autores (SGAE) la indemnice con una cantidad que oscila entre los 100.000 y los 200.000 euros en concepto de canon por el uso del aullido del rey de los monos. Ángeles Durán argumenta que, como propietaria intelectual de una partitura similar al alarido de Johnny Weissmuller, tiene derecho a cobrar por su uso como politono en los teléfonos móviles y otros productos audiovisuales.

Durán, que goza de justicia gratuita y abogada de oficio, presentó la demanda el pasado verano y el juez de lo Mercantil número 3 de Pontevedra, con sede en Vigo, ha fijado para el 6 de febrero del 2013 la celebración de una vista preliminar donde limará los detalles procesales previos al juicio civil ordinario, aún sin fecha, contra la SGAE por la supuesta vulneración de los derechos de propiedad.

El juez acaba de rechazar una petición de la viguesa para que adoptase como medida cautelar que la SGAE, consignase un depósito de más de 100.000 euros a su favor en una cuenta judicial mientras dura el proceso. Aún puede recurrir.

Ángeles Durán, una perito judicial también conocida por registrar la propiedad del Sol, así como la partitura más larga del mundo -con 24.000 millones de compases es pensionista tras un fatídico accidente de circulación que sufrió en 2001 y que ha dejado en ella graves secuelas que la obligan a tomar morfina. En declaraciones a EFE ha señalado que no tiene «culpa de que las cosas estén ahí» ni de que «los demás no las vean o no sepan cómo hacer». Atribuye las críticas que recibe a «amargados» e «impotentes que no son capaces de hacer nada, que no ven más posibilidades, cuando la vida es todo un abanico de colores, y uno puede hacer muchísimas cosas».


La SGAE

La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) considera que la reclamación de Angeles Durán por los derechos del grito de Tarzán, que plasmó en un pentagrama y registró en 2008, «no tiene ninguna base» y afecta al «derecho moral», por cuanto «no puedes reclamar algo que no es tuyo». Fuentes de la SGAE consultadas por EFE argumentan que la obra causa del litigio es «un grito humano» que en ningún momento se puede considerar «una autoría musical», en cuyo caso aducen que la demandante no había nacido cuando Edgar Rice Burroughs creó a su legendario personaje.

La SGAE confía en que el juez concluya que la reclamación «no es más que una anécdota» a la que se ha dado curso en el ámbito administrativo, pero que llevarla a la vía judicial resulta «una osadía».

Las fuentes de la SGAE consultadas por EFE destacan que en el auto de petición de medidas cautelares, el juez afirma que más allá de la mayor o menor musicalidad de la «obra» de la demandante para ser considerada tal, resulta «altamente osado» atribuirse la autoría. Considera «tan obvia» esta cuestión que califica la demanda como «un abuso ostentoso del acceso a los tribunales y al respeto que debe merecer la jurisdicción», así como «temeraria» la petición de la demandante, que tendrá como consecuencia la imposición de costas.

La SGAE aportará al juez una certificación de que no ha cobrado por derechos de autor del grito de Tarzán en politonos de móviles «ni nada por el estilo», así como un informe técnico musical en el que «se demuestra que no se puede meter en categoría de composición musical un grito humano». Respecto al registro de la composición musical que hizo Ángeles Durán del grito de Tarzán, titulada "La llamada", las fuentes de la SGAE explican que siempre que se cumple formalmente el trámite administrativo se le da curso, pero en todo caso bajo la responsabilidad de quien registra algo como suyo.

Fuente: ABC.es/La Voz de Galicia.es


La dueña del sol

Al notario le dio la risa. La mujer que tenía enfrente pretendía que diera fe de que se declaraba propietaria del Sol. Del astro rey. Del eje del sistema solar. Pero el hombre se recompuso y escuchó. «Soy propietaria del Sol, estrella de tipo espectral G2, que se encuentra en el centro del sistema solar, situada a una distancia media de la Tierra de aproximadamente 149.600.000 kilómetros...», reza el acta de manifestaciones que levantó el notario.


Ella es viguesa, se llama Ángeles Durán y vive en Salvaterra de Miño. «Existe un convenio internacional por el cual ningún país puede hacerse dueño de los planetas», explica la nueva terrateniente. Pero tal acuerdo no vincula a las personas «y hay un americano que escrituró casi todos los planetas y la luna; pero no el Sol», cuenta. Así que vio una clara oportunidad y decidió convertirse en su dueña y señora.

Lo hizo gracias a un método muy apropiado a las circunstancias: «La adquisición de la propiedad referida constituye una aprehensión electromagnética y radiactiva, al no existir ni conocerse en cinco mil millones de años propietario alguno hasta la fecha», dice el escrito notarial, que también la declara dueña «por usucapión, habiendo hecho de la propiedad del Sol de buena fe, de forma pacífica e ininterrumpidamente durante más de 31 años».

Dice que ya se ha reunido con el Ministerio de Industria -con idéntico asombro- para explicarles lo que hay. Incluso asegura que podría cobrar un canon a todo el mundo que utilice la energía solar. Que para eso es su dueña: «Si se paga por los ríos, ¿por qué por esto no?». Sea cierto o no, asegura que daría el 50% de los ingresos a los Presupuestos Generales del Estado, el 20% para las pensiones mínimas, un 10% para investigación y sanidad y otro 10% para erradicar el hambre. Quedaría un 10% para su bolsillo. Le faltaría acudir al Registro de la Propiedad para anotarse como propietaria del Sol, pero claro, el registro español no tiene competencias sobre el sistema solar.

Conflicto astral; Fuente: La Voz de Galicia.es 25/11/2010


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